Betty Castillo es una señora de 50 años de edad, residente de El Congo, Santa Ana, madre de 2 hijas mayores de edad y clienta de Enlace desde hace un año. “Una amiga me llevó a Enlace, así los conocí”. Doña Betty pertenece a un grupo de crédito conformado por 4 integrantes del mercado central de Santa Ana.
“Hasta la fecha me ha gustado la experiencia con Enlace y el trato de la asesora”.
Doña Betty no puede leer ni escribir, sin embargo, esto no ha representado un impedimento para que ella pueda luchar por sus metas y trabajar con Enlace. “Nunca me han dicho nada, con la huella se puede todo”. Al inicio, ella tenía temor de tramitar su crédito, pero al escuchar que sus compañeras hablaban de Enlace, tomó la decisión de intentarlo y así fue como ahora lleva un año trabajando con nosotros. La clienta y su grupo son personas muy responsables, nunca han presentado atrasos en el pago de sus préstamos y pagan siempre de forma puntual.
“En la vida siempre hay dificultades, pero trato de salir con la cuota que corresponde”.
Cuando supo acerca de Enlace, doña Betty ya tenía la venta de verduras, la cual representa su única fuente de ingresos. Sin embargo, para esa época, no tenía su venta tan surtida, pues empezó trabajando un crédito de $300 y actualmente maneja montos de hasta $600, los cuales invierte en su negocio. “Hay que seguir trabajando para mi familia porque esta vida es una lucha, hay días buenos y días malos, pero Dios siempre le ayuda a las personas”.
Doña Betty se siente cómoda y satisfecha con los productos financieros que utiliza, siendo un ejemplo de mujer luchadora que trabaja arduamente de domingo a domingo y que gracias a las ventas ha podido sacar adelante a sus hijas, teniendo más de 30 años de experiencia en las ventas.
El principal deseo de doña Betty es seguir creciendo con sus ventas y salir adelante.
“Todo lo que hacen para mí y para el grupo está bien, me han ayudado bastante gracias a Dios”.